★★★★
AÑO DE PUBLICACIÓN: 11/2016
#3 (Serie Vanderbilt Avenue)
#3 (Serie Vanderbilt Avenue)
EDITORIAL: HQÑ
PÁGINAS: 384 páginas.
TEMÁTICAS: Romántica, Ficción Histórica.
SINOPSIS: Si todo desapareciera, tal vez Alessandra y Sean no se habrían encontrado nunca. Si todo desapareciera, no se habrían enamorado. Si todo desapareciera, jamás se habrían asustado del amor que sentían.
Alessandra Bonasera está acostumbrada a fingir, al fin y al cabo es actriz. Empezó de muy pequeña, cuando vivía en Little Italy y su madre llevaba a casa a hombres peligrosos y ella tenía que proteger a sus hermanos pequeños. Creía que nunca volvería a Nueva York, que siempre estaría en Los Ángeles, pero una obra de teatro y el director del momento la llevan de vuelta y se reencuentra con sus dos mejores amigos y su pasado.
Sean Bradford creció escuchando historias sobre el honor y la justicia, pero cuando estaba en la academia de policía su mundo entero se desmoronó y el mundo entero le dio la espalda. Creía que nunca volvería a Nueva York, pero le reclaman para el que promete ser el mayor caso de la historia y decide volver. Quizá ahora por fin averigüe la verdad sobre lo que sucedió.
Dos almas heridas destinadas a encontrarse y unidas por un trágico hecho del pasado que las marca y las obliga a alejarse… Un amor que no desaparecerá ante nada.
Con
tristeza me despido de una serie que en mi opinión ha sido increíble. Desde “Vanderbilt
Avenue” me enamoré de la magnífica pluma de la autora, junto al modo en que
cada palabra te absorbe sin desear despegar los ojos del libro hasta no haberlo
dado por finalizado. Jack, Nick y Sandy nos demostraron a lo largo de la serie
que la amistad a pesar de tener sus brechas será imposible de aislar, sobre todo
que también nos sitúan en un paradigma que no ha estado visto muy bien por
todos y es la amistad entre hombres y mujeres. En los tres libros el amor de
nuestros protagonistas desde pequeños hasta adultos nunca dio un atisbo de ir
más allá, los tres siempre demostraban el cariño que sentía el uno por el otro
como un cariño de hermanos, de amigos y hasta allí se cierra el ciclo.
Tengo
al mismo tiempo muchas cosas por decir en cuanto no solo a la serie en general,
sino de esta tercera y última parte que trata acerca de nuestra misteriosa
Sandy. En los dos primeros veíamos una mención de la chica e incluso pequeñas
apariciones de ella en el pasado las cuales me dejaban a mí queriendo un poco
más para conocerla a profundidad. Nos dejaban intrigados por el modo de ser y
los secretos que ésta escondía. Así que luego de haber finalizado mi curiosidad
quedó muy bien satisfecha.
No
queda mucho por decir de la portada y su título, estos dos elementos fueron
increíbles y se adaptaron a la perfección con la historia entre Sandy y Sean.
Siempre tienen ese aire viejo, estilo gánster lo que hace cautivarnos más e
implantarnos un hambre de libro. Luego, continuamos con el increíble contenido.
Una vez leí a Anna Casanovas no he querido separarme de su escritura, con su
ingenio puede atraernos y endulzarnos el oído para devorar cualquier historia posible.
Así me sucedió con Sandy y Sean. Está narrada en tercera persona esta vez nos
permite fácilmente conocer el pensamiento y los movimientos de los dos sin
problema alguno. Vemos como la autora juega con sus narraciones en la serie,
primero alterna las primeras voces con la tercera, en segundo emplea la tercera
en un principio y finaliza con la primera y en éste, únicamente usa la tercera
para ponernos en bandeja esta increíble novela.
Sean
trabaja en el departamento de asuntos internos, su padre se ha suicidado y a él
le acusan de ser el progenitor de semejante bestia. Él sabe que su padre no fue
una manzana dulce, a lo largo de su vida supo que él ha estado aceptando dinero
de una no muy buena procedencia, sin embargo, la acusación más grande y la que
en realidad le duele está decidido a hacerle oídos sordos porque realmente
suena a algo lo cual su padre nunca haría. Por nuevas casualidades el señor
Anderson toca en su puerta para pedirle ayuda en el nuevo asunto policiaco,
tras haberse aliado con Luciano Cavalcanti, ahora forma un grupo junto a Jack,
Nick, el mafioso de Little Italy, otro compañero, y él. Ahora Anderson quiere
el ingenio de Sean y en beneficio le proporcionaría la información necesaria para
resolver el caso de su padre.
"Querer a una persona implica eso, quererla tal como es, no buscar la manera de desmontarla y sustituir las piezas que no te gustan por otras"
Sandy
se ha cambiado el nombre, ahora es Alessandra Bonasera, una increíble actriz de
Hollywood que ha estado toda su vida escapando del pasado. Le teme a lo que fue
y mediante la actuación siente que aquello le ayuda a olvidarse de sí misma.
Nunca ha estado en sus planes regresar a aquel barrio, donde sus pesadillas
empezaron. Sin embargo, ahora el destino le incita a ir tras la invitación de
la boda de nada más y nada menos que de Jack y Siena. Sus amigos y hermanos de
toda la vida ansían volverla a ver, ahora que los dos amigos han vuelto a ser
inseparables y han encontrado al amor de sus vidas, únicamente necesitan de la
grata compañía de quien una vez fue su mejor amiga en la salud y en la enfermedad.
Al mismo tiempo, Alessandra está recibiendo de una forma muy extraña unos
mensajes sin remitente, unos mensajes que sin duda le ponen la piel de gallina.
Ahora, volviendo a Little Italy se encontrará con Sean y ese amor que nunca ha
podido experimentar, lo vivirá al máximo.
El
inicio junto al giro que toma la novela me encantó, sin duda ha sido de esas
tramas donde esperas con el corazón desbocado a tener una respuesta de las mil
incógnitas que se te presenta al principio del libro. Anna Casanovas juega con
el pasado de los dos para traerlo al presente y de una forma que te deja la
quijada por el suelo. Sin deseo de hacer Spoiler, descubrir que el pasado de
Sandy de cierta forma se entrelaza con el de Sean me impactó muchísimo. El modo
en que estos dos se encuentran y comienzan a relacionarse ha sido el modo más
tierno y dulce posible, considero que esta historia en comparación a las
anteriores está más cargada de intimidad, finura y amor. No se presenta de un
modo pasional, es más ingenuo por parte de los dos.
Aunque
quiero contrarrestar un poco este tema porque para mi gusto desborda un romance
muy rápido, el amor que surge entre los dos sucede en un abrir y cerrar de
ojos, con un par de miradas, un par de dos capítulos ya se encuentran
perdidamente enamorados y aquello no lo sentí tan real. Me hubiese gustado ver
extenderse ese romance, paso a paso para así degustarlo mejor. Así también las
conversaciones, las sentí levemente forzadas, no tan sueltas o reales como las
sentí en los primeros dos libros.
"Quería que ese beso significase un principio, cientos de ellos, miles y ningún final"
Los
personajes de Sandy y Sean fueron increíbles, los dos me gustaron, desprendían
una fuerza y un imán para atrapar al otro. Los dos se fusionaron con dulzura,
con deseo y anhelo. Sandy es de esas chicas imposibles de romper por completo,
aunque nunca haya experimentado el amor, aunque haya sufrido es fuerte. Sean
por otro lado, ha vivido como ella el dolor desde hace muchos años, no es tan
querido y él así lo prefiere. Conocer a Sandy le hizo darse cuenta de esas
brechas u hoyos que le faltaban, como la felicidad, soltar una risa sin
necesidad de aparentarla. Me hubiese gustado ver un poco de resistencia por
parte de él, ese lado frío mezclándose con la nueva experiencia de amar.
En
“Si todo desapareciera” vuelven a aparecer muchos de los personajes del
primero, además de que vemos el futuro de los protagonistas en el primer libro.
Tenemos a Jack a punto de casarse con Sienna, a Nick esperando un hijo de
Juliet con quien ya se encuentra casado y la amistad entre estos dos
inseparables. Conocemos un poco más al señor Anderson, que su pasado siempre ha
sido un misterio y el cual es un personaje el cual causa mucha intriga. Además,
Luciano Cavalcanti con su romance no se quedará tampoco atrás. Una de las
buenas cosas que tiene la trilogía, es que además de ponernos en primer plano a
los protagonistas, nos permite asimismo conocer a profundidad el resto de
personajes y su entorno.
"-Si alguna vez estoy lejos de ti [...] pase lo que pase, tienes que sobrevivir.-¿Por qué?-Porque no puedo imaginarme un mundo sin ti"
Sin
embargo, creo que extendieron muchas cosas de Jack y Nick. En muchos momentos
les dieron más importancia que a los mismos Sean y Sandy. Otra cosa que quizás
me dejó con un sabor amargo en la boca es el modo en que desarrollaron el
misterio de Sandy en el presente, las misteriosas pistas de su admirador
secreto ya son muy predecibles a la primera. En todo el libro lo supuse y
estuve muy segura hasta que el libro me lo afirmó. Hubiese esperado algo mejor
de esto, sobre todo porque en este tipo de historias lo interesante y llamativo
es que tus ojos se desborden al saber quién es el causante de todo sin tú
tenerlo en la mente. Otra cosilla por ahí para añadir y que estuve a punto de
olvidar, es el modo en que se desarrolla el enfrentamiento de los chicos con la
mafia y los policías corruptos. Lo dejaron muy por encima, no lo desarrollaron
a profundidad ni le dieron tanta expansión al momento del enfrentamiento.
Fueron cosillas que se dijeron por encima, como si no hubiese sido la gran cosa
y eso me enfadó, de verdad hubiese querido leer a más profundidad aquello
puesto que fue uno de los temas centrales en la historia en lo que todos le
pusieron empeño y esmero.
"Encontrar el amor y la esperanza en el lugar más insospechoso y luchar para sacarlo adelante"
Si
con los primeros libros quedé enamorada, finalizar la trilogía me dejó por las
nubes. Fue una historia entretenida, llena de misterio y romance desbordante.
Aunque el final fuese, como ya dije antes, predecible… hubo algo que de verdad
me sacó los ojos del impresionismo. La pluma de Anna Casanovas es maravillosa;
sencilla, llamativa, flameante. Eso sí, encontré un par de errores ortográficos,
algunos inconexos con las tildes, sin embargo, no estoy del todo segura si ha
sido por la edición que tengo o qué, pero lo pondré en duda por si acaso.
“Si
todo desapareciera” ha sido una historia magnifica para cerrar la serie de los
tres mejores amigos. Es una historia que trata sobre las posibilidades del
amor, el renacer, las brechas que día a día se deben enfrentar y traspasar.
Sandy y Sean lograron enseñarme tantas cosas, me mostraron el lado más humano
del ser, el perdón, el continuar hacia delante dejando el pasado en lo que es,
el pasado. Fue una novela con momentos inesperados, fichas por encajar, por
descubrir. Anna Casanovas es una gran escritora, y por consiguiente, hizo un magnífico
trabajo con la serie. Por supuesto que tuvo sus errores, algunas veces esperaba
otra cosa, pero generalizando en lo que inició y finalizó, estoy muy satisfecha
con el resultado.
¡CALIFICACIÓN!
4/5
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