La distancia entre tú y yo - Kasie West

★★★★

AÑO DE PUBLICACIÓN: 2016

EDITORIAL: Plataforma NEO

PRIMER CAPÍTULO: LEER

PÁGINAS:  314 páginas.

TEMÁTICAS: Youngadult, romántica, chick-lit.

SINOPSIS: Caymen Meyers aprendió de muy pequeña que no se puede confiar en la gente rica. Y después de años estudiándolos detrás de la caja registradora de la tienda de muñecas de porcelana de su madre, nada le demuestra lo contrario. Un día Xander Spence entra en la tienda. Es alto, guapo y extremadamente rico. A pesar de su encanto y el hecho de que parezca ser la única persona que la comprende, Caymen sabe que su interés por ella no va a durar. Porque esa es precisamente una de las cosas que aprendió de su madre: la atención de los ricos se desvanece rápidamente. Pero justo cuando la lealtad y el afecto de Xander están a punto de convencerla de que ser rico no es un defecto, Caymen se da cuenta de que el dinero jugaba un papel mucho más importante en su relación de lo que pensaba. Con tantos obstáculos en su camino, ¿serán capaces de recorrer la distancia que los separa? 

Ayer por la tarde me entretuve leyendo los múltiples títulos que están guardados en mi lector electrónico. Tengo lo suficientes para invernar una temporada devorando libros, pero  entre uno y otro, me topé con este. En una entrada escogí algunas lecturas que quiero acabar lo más pronto posible porque son aquellas las cuales ahora han capturado mi atención. De éste, su portada me cautivo lo suficiente así que queriendo comenzar una lectura fresca y sencilla, me animé. Caymen Meyers nuestra protagonista estrella, ha vivido toda su vida en la segunda planta del negocio de su madre; una tienda que vende muñecas de porcelana. En una pequeña locación, con apenas un angosto sitio dónde dormir y seguramente a punto de quebrar, Caymen usa su excéntrico humor para espantar los malos ratos que se filtran por su cabeza.

En cuanto a su personaje, me gustó mucho. Desde el principio supe el estilo de lectura que iba a encontrarme y por ello el estilo tan peculiar de la chica. Si quizás la historia no estuviese narrada por su parte, no tendría ese brillo único que hace al libro tan divertido y agradable. No hay persona más sarcástica que ella, por cada comentario utiliza sus frases célebres para burlarse de ella misma y del resto. En cuanto abre la boca ya te encuentras con una sonrisa plantada en tus labios al instante, es tan eficaz el modo de emplear su humor que se te hace imposible siquiera no reírte de diversión. Caymen desde siempre se ha burlado con su madre acerca de las personas ricas, tiene una visión de la vida en que los ricos dominan y los pobres se tienen que limitar a estancarse tras un mostrador o intentar no agrandar sus opciones en la vida.

Sus aspectos positivos en realidad son en mayoría buenos, tal vez por escasos momentos sentí una leve picazón en cuanto a su actitud. Al principio la burla o su forma de hacer hincapié en cualquier acción que demuestre tener dinero no me repelaba, pero en el medio del libro hasta su final admito que se me astillaban los huesos por hacerle callar. En todo caso, Caymen me gustó, sobre todo su nombre, que nunca en mi jodida vida había escuchado algo como ese. Me gusta además, la relación con su mejor amiga *que por cierto, soy tan mala en aprenderme nombres que simplemente le diré “su mejor amiga”*. El circulo amistoso entre las dos y la nueva relación de ella con un chico de un grupo hará que la soledad no se siente tan a profundidad.

"Durante un solo segundo pienso en una vida sin la tienda de muñecas. Durante ese segundo me siento libre"

Pero, por otro lado, Caymen dejará de pasar sus tardes de aburrimiento en el almacén al instante de conocer a nuestro chico Xander, tan jodidamente apuesto como jodidamente rico. Desde que entra al almacén ya se huele el olor a dinero, un montón de dinero. Su sola presencia, la ropa que usa, el modo en que camina y en sus gestos se ve su alta posición económico. Para ella es inevitable no burlarse, al minuto en que se encuentran cara a cara, ella va a arrojando su sarcasmo en un pim pam. Lo que no esperaba era que el apuesto Xander fuese inmune a ello y en vez de provocarle vacilación o enojo, le divirtiera.

A mí Xander me encantó, y no sólo lo digo por ser el personaje masculino protagónico, lo digo en toda su regla. Desde que abre la boca ya sabes lo bueno que será, me fascina esa atracción que desprende con su simple presencia, a mí me hizo echarme encima suyo una vez me lo imaginé en mi cabeza. Su sentido del humor es único, es de aquellas personas con las cuales te puedes sentir cómodo en un abrir y cerrar de ojos. Al leerlo sentí haberme transportado hasta allí y permanecer en el cuerpo de Caymen mientras Xander le hablaba o la miraba. Es uno de esos personajes que sin duda te atrapan el corazón, los órganos y los sentidos para apropiarse de ellos. Esos pequeños gestos, esas pequeñas acciones hacia Caymen que muchos no aprecian, convierten a Xander en uno de mis personajes favoritos masculinos.

"-Hola abuela. Ya tengo tú muñeca... sí, una señorita en la tienda me ha ayudado con ella [...] pelo oscuro, ojos verdes. [...] ¿Caymen? bueno, pues Caymen te manda un saludo... ¿dulce? no sé si es dulce, pero desde luego tiene algo.

Mi sonrisa se ensanchaba cuando esas acciones de tomar un sorbo de un café y brindárselo en cada encuentro me ponían en plan OTP y fanguirleo a la lata. Hay tanto y poco que decir sobre él, que sencillamente les dejaré la puerta entreabierta para hacerles picar las ganas y esperar a que lean el libro. Conocer a Xander para Caymen fue en mí parecer hacerle abrir los ojos. Toda su vida junto a su madre se la ha pasado efectuando bromas negativas en las personas ricachonas, pero al verlo e interactuar con él, su perspectiva se expande como una halo de luz. Del mismo modo en que he quedado enamorada por los dos personajes principales, quedé enamorada de su relación.

No será de aquellos flechazos dónde la baba se le descuelga a cada uno, pero toda atracción al instante en que se conocen hace que deseen volverse a ver. El gusto se palpa de una, pero nunca encontrarás pensamientos o expresiones de parte de Caymen dónde te hagan vomitar por amor. Su humor tan grotesco, divertido e irónico que se proyecta también en la relación o en las emociones hacia Xander. Gustarle tanto le coloca el mundo patas para arriba, pero es una chica autónoma, y al decidir explorar sus emociones aunque en su mente sepa que no es la mejor opción, poco a poco esa atracción se desarrollará en algo más. Otra palmadita positiva para la autora es el modo en que desarrolla las escenas entre Xander y Caymen. Los dos no saben lo que quieren, para ellos en sus mundos son inoficiosos y sin alguna meta en la vida. Caymen no quiere entrar aún en la universidad, Xander no quiere ingresar en los negocios familiares, pero tampoco saben qué esperar de la vida. Poco a poco entre los dos irán colocándose retos y propósitos que no sólo hará desarrollar los sinfines de sentimientos mutuos, sino que además, descubrirán quienes son en realidad.

Nunca había leído alguna novela de Kasie West, pero en definitiva escogí la correcta de ella. “La distancia entre tú y yo” es una novela fresca, entretenida, divertida, romántica y podría alabarla un poco más. Sus conversaciones no son nada forzadas, son como un río con una corriente sin parar. Es atrayente, obsesivamente embriagante. Sólo necesité alrededor de un par de horas por la noche y tres en la mañana para darlo por terminado. Sin duda es una gran lectura. Cierto punto negativo fue que con el paso de la historia, a veces la narración se volvía muy simple, y a simple, me refiero que la fuerza de escritura que se sentía fuertemente en un principio, decayó levemente. Quizá, por esta razón me abstengo de darle un enorme cinco, pero sin duda alguna es una novela que recomendaré cada vez pidan mi opinión.  

¡CALIFICACIÓN! 

4.5/5